jueves, marzo 18

De libro a serie, de serie a libro

Es curioso. Cuando veo una película o una serie que está basada en un libro que ya he leído, siempre le encuentro pegas. “Esto no era así”, “ahora este personaje no hace esto”. Es curioso que esto también me pase al revés.
Me explico. Hará unos cuatro o cinco meses me enganché (porque yo no sigo las series, yo me engancho a ellas, así, radical) a True Blood, una serie estadounidense sobre vampiros, que aunque ya tenía más que hastío por las historias de chupasangres que últimamente plagan cines y librerías, esta me resultó… diferente y me gustó. Ahora, me han regalado el libro en el que se basa la serie. No he podido evitar echarle un vistazo y, al leer el primer capítulo, que básicamente es el primer episodio de la primera temporada de la serie, me era imposible no comparar el libro con la serie y comentarme a mí misma que “esta parte no es así”. Cuando en realidad sí, es así, lo que estaba mal era la serie.

La serie la dejé a la mitad por diversas incompatibilidades con mis horarios universitarios además de por la ineficacia del sonido de mi ordenador. Ahora, con el libro, me dan ganas de seguir donde lo había dejado, sobre el principio de la segunda temporada. Por otra parte, sin embargo, creo que esperaré a ver qué tal se desarrolla el libro y me los leo primero para después poder criticar la serie a gusto y decir: “pues esto no era así”.

La tercera temporada de la serie de la HBO comenzará el 13 de Junio en Estados Unidos.
Con esta entrada, además, inauguro una nueva sección de este blog en la que las series también tendrán su huequito.

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